Señor que no eres mi Dios.
Aquí estoy, plena, abierta, más viva que muerta.
Y es el insomnio de una vida, el que se disipa en mi horizonte, frente a mis ojos...
Cielo y tierra...me miro con desconocimiento.
Veo a través de tí, siento tu tacto.
Eres luz y oscuridad...relevancia independiente.
Otras 4 paredes y yo rodeada por éstas.
Haré otro viaje, ahora y para siempre.
No sé si volveré....
No sé....
Ni me interesa....

No hay comentarios:
Publicar un comentario